Domingo Santa Cruz

 

 

La construcción del Partido FMLN y el aporte de las cinco organizaciones históricas que lo constituyeron

 


Fecha:  30 de julio de 2005.  El texto corresponde a una presentación en panel en evento por el 25 aniversario del FMLN. A Domingo Santa Cruz le correspondió exponer la parte del PCS, del cual fue miembro.
Fuente: Texto puesto en internet por Kaos en la Red en septiembre de 2005 y tambien en varias páginas del FMLN.
Esta edición: Marxists Internet Archive, diciembre de 2010.  


 

 

EL 25 ANIVERSARIO DEL FMLN

PANEL

 

  1. ¿EN QUÉ CONDICIONES HISTÓRICAS SURGE EL PCS?

El abordaje de las condiciones históricas que permitieron y exigieron el surgimiento de un Partido Comunista en El Salvador, nos plantea necesariamente referirnos entre otros factores al Sistema Político, Económico y Social imperantes en aquel período histórico. En lo económico, por ejemplo, en aquellos tiempos era predominantemente agrícola, (los sectores industrial y minero no llegaban al 15 %); la distribución de la propiedad era extremadamente desigual, los propietarios apenas llegaban al 8.2 % (117.680) y no propietarios representaban el 91.8 % de 1.316.681 habitantes. Además existía un predominio del monocultivo del café que representaba el 80 % de la renta nacional y su comercialización en 1929 constituyó el 85 % de las exportaciones; por ello, al bajar los precios en el mercado internacional a más del 54 % durante la crisis mundial de la economía capitalista fue, un duro golpe para la columna vertebral de la frágil economía nacional, cuyo impacto estremeció a todos los sectores de la población y particularmente a las masas trabajadoras.

En el año de 1930 más del 40 % de los pequeños propietarios endeudados, dedicados a la agricultura, a la ganadería, la industria, el comercio perdieron sus tierras y sus pequeñas economías;

El hambre llegó a niveles de desesperación a las familias campesinas y trabajadoras empobrecidas; estaban condenadas a morir, porque no había capacidad del gobierno reformista del Ing. Arturo Araujo ni siquiera en ayudarles a mitigar la crisis, ya que su arribo a la presidencia de la república no fue suficiente para quitar del poder a la Oligarquía Cafetalera y latifundistas de aquellos años.

Las alternativas que se le presentaron a las masas campesina y populares eran: Morir de hambre o pelear para obtener por la fuerza la entrega de tierras que les habían arrebatado o prometido.

Ya desde los años 1920-1925, la tiranía dinástica gobernante había tomado la decisión de crear la organización para-militar “LA LIGA ROJA” como instrumento de apoyo para tratar de detener el descontento popular realizando numerosas matanzas y asesinatos de trabajadores rurales y de la ciudad.

 

  1. LA CRISIS MUNDIAL DE LA ECONOMÍA DE LOS AÑOS TREINTA

      • Trajo penurias adicionales a las condiciones socioeconómicas y políticas de las masas populares en aquellos momentos, las cuales ya eran insoportables. La crisis mundial de, la economía capitalista de los años 30, impactando drásticamente contra las vulnerables clases trabajadoras del campo y la ciudad y la población salvadoreña en general.

 

  1. CARACTERÌSTICAS DE LA POBLACIÒN

      • Para juzgar correctamente algunos de los rasgos del PCS desde su fundación es conveniente detenerse en la característica predominantemente rural de la población salvadoreña en aquel período. Varios investigadores nacionales e internacionales coinciden en señalar que el 80 % de la población salvadoreña en los años 20 del siglo XX, era esencialmente rural. Esta afirmación se basaba en que la mayoría de los pueblos tipificados como urbanos, eran realmente rurales: la vida en general estaba sometida al ciclo de la naturaleza; técnica inexistente o atrasada; concepción del mundo saturada de ideas poco desarrolladas y hasta irracionales; los remanentes feudales, el tradicionalismo y el conservadurismo eran predominantes.

      • Un estudio sobre la composición social de 954.127 personas, con base al Censo de población de 1930 ésta se clasificaba: “Clase Alta” (dominante) 640 personas, el 0.2 %; clase media 38.247h. 4.4 %; “Clase baja“ 815.359 h , o sea, el 95.4 % ;

 

ALGUNOS HECHOS RELEVANTES SOBRE EL PROCESO DE ORGANIZACIÓN

 

  1. IMPACTO DE LA REVOLUCIÒN BOLCHEVIQUE

    • Otro factor importante de la situación internacional del período lo constituyó la influencia de Las ideas de la Gran Revolución Socialista de Octubre en Rusia, las cuales fueron, sin ninguna duda, las que mayor impacto tuvo en las bases de los trabajadores y trabajadoras, de la intelectualidad y de otros sectores sociales de nuestro país en aquellos difíciles momentos históricos.

No era para menos, por primera vez en la historia de la lucha popular internacional, el proletariado ruso, guiado por el Partido Bolchevique y Vladímir Ilich Ulianov (Lenin), aprovechando la profunda crisis nacional de Rusia y las contradicciones de las fuerzas imperialistas del mundo durante la IGM, sorprendió y sacudió a la humanidad entera con la primera revolución socialista en Rusia. Este acontecimiento abrió una nueva época histórica, abrió la época de las revoluciones proletarias en los países capitalistas, ejerció un influjo muy grande en los países sometidos al colonialismo, provocando un tremendo impulso para el surgimiento y desarrollo de los movimientos revolucionarios y de liberación nacional.

La delegación salvadoreña estuvo representada por Farabundo Martí y Moisés Castro y Morales. 

 

  1. FUNDACIÓN DE PCS

 

En tales condiciones sociales, económicas y políticas del país, de la región y del mundo, que un grupo de trabajadores(as), provenientes del movimiento sindical, campesino e intelectual de El Salvador deciden un 30 de Marzo de 1930, en las orillas del Lago de Ilopango, crear el PCS.

 

SU PRIMERA PRUEBA

 

  1. Hablar de la fundación del PCS exige hablar de algunos de sus fundadores: a Farabundo Martí, Feliciano Ama, Modesto Ramírez, Francisco Sánchez, Mario Zapata, Miguel Mármol, <segundo Ramírez, Rasfael Bondanza, Alfonso Luna, Alberto Gualán, Ismael Hernández, Luis Díaz, Miguel Angel Vázquez, Moisés Castro y Morales, Víctor Manuel Angulo, Gregorio Cortez Cordero, Narciso Ruiz, Juan Carlos Bolaños, Luis López, etc. Así mismo, al compañero internacionalista Jorge Fernández Anaya, delegado por el Partido Comunista Mexicano y del Buró del Caribe del Socorro Rojo Internacional.

 

 

 

  1. LOS PRINCIPALES ACIERTOS Y DIFICULTADES

 

Basta recordar el CROS, CGTS, FMS, PRAM, CUSS, FUSS, FESTIAVTSCES, ANDES 21 de JUNIO, Cómites Obreros, Comité de Huelgas,  PAR, PR, UDN, MIPTES, UNO, etc.), dejaron huellas importantes en el desarrollo de la conciencia de clase de las masas trabajadoras, procesos de acumulación de la experiencia y desarrollo de la conciencia política contra la dictadura militar.

 

APORTES EN EL PROCESO DE LA UNIDAD DE LA IZQUIERDA REVOLUCIONARIA

 

La FAL se formó exclusivamente con militantes de la JC y del PC. Aunque con el tiempo se logró reclutar a voluntarios no militantes, la principal fuente de crecimiento de la FAL siguió siendo el PC. Esta particularidad le dio a las FAL, con el tiempo, una calidad importante para la realización de misiones, tales como:

 

II. ¿CUÀLES FUERON LOS PRINCIPALES ACIERTOS Y DIFICULTADES EN

EL PERÌODO DE DISOLUCIÒN Y EN LA CONSTRUCCIÒN DEL PARTIDO UNIFICADO?

 

  1. Haber tomado el acuerdo de integrar un solo partido el 5 de Agosto de 1995 creemos que fue una decisión correcta. El camino recorrido por el Partido durante los 10 años de aquella decisión, han confirmado cuan justo fue. Si enumeramos y valoramos los resultados, aun con las dificultades, de las fallas y errores, estamos seguros que no habríamos podido construir la fuerza política electoral y social que constituye el FMLN hoy en día. Es cierto que hemos señalado errores y fallas y dado los alertas convenientes para corregir a tiempo. Necesitamos transformar y desarrollar al FMLN como una fuerza real con capacidad para derrotar al enemigo y avanzar hacia la construcción de una nueva sociedad.

  2. Asegurar un acuerdo con mucha mayor solidez y confianza; no pocos compañeros nuestros sentían la necesidad de debatir algunos temas de fondo, de concepción, quizás debimos realizar una labor mayor de persuasión, de convencimiento, de consulta, otorgar el derecho a ser oído antes de comunicarles el acuerdo. El error antes citado impidió que lográramos una inserción e integración de toda la militancia a las nuevas tareas del Partido. Además, se presentó una especie de buruca, en el acaparamiento de los cargos de dirección interna del partido y de elección popular; la mayoría de los cuadros del PC no estábamos preparados para una inserción no planificada. Muchos esperábamos ser llamados y recibir instrucciones de la dirección como era nuestra costumbre o al menos ser consultados. Lo que sucedió durante la disolución pareció algo frustrante para varios compañeros y compañeras; daba la impresión de que muchos de los cuadros con experiencia acumulada, ya no eran necesarios. No hubo los mejores criterios ni procedimientos para la selección y distribución de cuadros, que es muy importante para un Partido revolucionario. El oportunismo y el arribismo fueron la nota dominante, y la Dirección del Partido cayó a la vorágine de los cargos de elección pública.

Sin estar en contra de la participación de cuadros de dirección nacional, la forma de cómo se realizó, constituyó una falla que no permitió que una buena parte de los cuadros con experiencia, con solidez política e ideológica fueran ubicados con criterio político, como parte de una política de construcción y desarrollo del nuevo partido para enfrentar los problemas ideológicos y organizativos que se fueron entronizando. Buena parte de nuestra militancia se quejó, se molestó, hizo conjeturas, las continua haciendo, sin hacer de ellas un valladar. No comparte, pero muestra madurez y disciplina para esperar lo mejor: la corrección.

  1. Las principales fallas políticas tienen que ver con el abandono de las bases populares, haberse desentendido de sus problemas cotidianos y estar junto a ellas; no hay una organización popular, ni sectorial ni territorialmente hablando; las masas podrían contar con instrumentos idóneos con que luchar;

  2. Otras fallas tienen que ver con el descuido en la formación política e ideológica de la militancia y de las masas organizadas; no aplicamos ni desarrollamos una política de formación de cuadros; descuidamos la movilización de las masas, dejando de lado la necesidad del desarrollo de su experiencia y conciencia política.

  3. Todo lo anterior se resume en la debilidad principal: dejamos se ser el Partido revolucionario y nos convertimos en un partido electorero.

  4. Hay una falla que se ha vuelto crónica: la concentración de cargos en una misma persona. Esta tendencia se repite y se reproduce desde las autoridades nacionales hasta las locales. Este problema, además de bloquear el desarrollo de nuevos cuadros, hace ineficiente e ineficaz al partido, perjudicando su imagen, la confianza de cuadros importantes frente a la base y sobre todo, la posibilidad de cumplir con su misión histórica. Lo delicado del problema es que con esta práctica se afectan algunas áreas de trabajo, en donde se han vuelto crónicos los problemas del RUA, del PADRÒN y de su ineficacia para ocuparse de la política de Construcción y Desarrollo del Partido. Pero no sólo en esas áreas se refleja este problema. Hay compañeros(as) que siendo miembros de un organismo de Dirección, son al mismo tiempo Alcaldes, Diputados o concejales municipales, y en dependencia del tipo de función pública, es lógico que asuman responsabilidades en Comisiones o Secretarías, misiones internacionales, Comisiones Municipales, de Consejos Departamentales de Alcaldes o Directores de Comures y hasta de Coordinadores municipales o departamentales del Partido, cuyas consecuencias las observamos en el tipo de partido que tenemos, ineficiente, amarrado. Una falla sensible ha sido el no haber definido las reglas a los militantes para cargos de elección pública en cuanto a la forma de entregarles y definirles los salarios. Situación que ha conducido a no pocos problemas de difícil solución:

    1. Se ha creado una especie de élite de cuello blanco con todos los privilegios, especialmente en las Alcaldías grandes, donde hay miles de empleados y funcionarios, donde se genera un poder partidario dentro del partido. También con algunos(as) Diputados(as) que no conducen ni dejan conducir; nunca tienen el tiempo necesario para ocuparse de la construcción del partido que se necesita.

    2. Con ese poder orgánico y económico algunos funcionarios lo han utilizado para construir un aparato de apoyo, argollas o grupos de poder extra institucional, que deciden qué hacer y qué no hacer; si les conviene o no les conviene a su imagen y a su status.

    3. En el caso de algunos Alcaldes y Concejos Municipales, han utilizado sus cargos para emplear a familiares y su gente de confianza personal o de grupo, como parte de los mecanismos para fortalecer su poder y si es necesario, utilizarlo de forma desafiante contra el partido mismo.

 

  1. Hay varias otras fallas que podríamos señalar, como por ejemplo, la actual política de afiliación, pero hay también experiencias positivas de nuestro partido que no podemos ignorar. Esa fortaleza la encontramos en los mismos campos en que estamos fallando. No todo es falla y debilidad. La experiencia legislativa no es despreciable, la cual le ha dado prestigio y autoridad política importante al FMLN, pese a los problemas de traición y al fenómeno oportunista que sigue estando presente. Dentro de ella se han especializado y desarrollado varios cuadros prestigiosos que deben ser objeto de una política de aprovechamiento, como parte de la política de desarrollo del partido. Esta misma valoración la tenemos en el campo del trabajo municipal, tanto en los niveles de gobiernos como de jefaturas y otros empleados con acumulación de experiencias de especialización. Hay logros importantes en materia de experiencia, desarrollo político y especialización en la Dirección Nacional.


III. ¿CUÁLES SON LOS RETOS QUE SE LE PLANTEAN AL FMLN PARA QUE PUEDA CONVERTIRSE EN UN PARTIDO REVOLUCIONARIO, DEMOCRÁTICO Y SOCIALISTA?

 

  1. Necesitamos una política de desarrollo y fortalecimiento del FMN.

Lo primero que quisiéramos plantear con todo respeto, es, necesitamos cambiar la actual política de crecimiento y sustituirla por una política de Construcción y Desarrollo del Partido, a la cual se le podría adjuntar una afiliación controlada y atendida ideológicamente. A nuestro juicio, la actual política de crecimiento no es coherente con el carácter revolucionario del Partido. Tenemos razones bien fundadas a que atenernos y no sólo teóricas en que apoyarnos para expresar esta opinión sobre los principales retos del Partido de cara a su misión histórica. La actual política de crecimiento está basada casi exclusivamente en la afiliación coyuntural, cíclica, la cual, no sólo está agotada, sino que está dañando estratégicamente al Partido.

Los daños que dicha política está ocasionando al interior del partido, a su integridad orgánica, al posicionamiento ideológico que debe tener cada militante sobre su partido, han ocasionado un debilitamiento de su moral y visión estratégica, que de no corregirse a tiempo, difícilmente lo convertirán en una real fuerza política capaz de cumplir con su misión histórica.

En la medida que se mantiene la actual política de crecimiento, en la medida que no tomamos la decisión de dar un viraje hacia una política de Construcción y Desarrollo de nuestro partido, será difícil detener el desaliento que va en aumento y amenaza con la integridad orgánica, política e ideológica que necesitamos para derrotar a los enemigos y adversarios de la revolución democrática planteada por el FMLN.

A nuestro juicio, debemos revisar la aplicación del método de afiliación coyuntural con fines puramente electorales, si no queremos quedar reducidos a un partido exclusivamente electorero. Debemos convencernos que la fuerza de un partido está determinada no tanto por su volumen, por el número de Afiliados y Afiliadas registrados en el RUA y en el Padrón Electoral. Sobre todo, cuando, después de cada evento electoral interno, todo ese volumen se esfuma, sobre todo si no ve su beneficio personal; esta gente llega, observa el terreno, lo ve muy complicado y se va sin participar en la pelea contra el enemigo.

La fuerza de un Partido revolucionario está en la calidad de sus militantes, en su fuerza ideológica, en su convicción de lucha, en su clara identificación con el proyecto revolucionario; la fuerza de un partido revolucionario está determinada por el nivel de desarrollo de su conciencia revolucionaria y de su capacidad para ganar, organizar y conducir a un amplio movimiento social, conducirlo, educarlo y construir con él o con parte de él, un combativo movimiento popular. Esta calidad no puede surgir de manera espontánea, con una visión y una práctica reducida, únicamente en las coyunturas electorales.

Necesitamos urgentemente readecuar y reorientar la actual política de afiliación que conviene mas a las corrientes reformistas y renovadoras que han tomado cuerpo en el interior del partido; debemos demoler los cimientos en que se apoyan esas tendencias y cerrarle los espacios a la derecha neoliberal y a sus medios de comunicación puestos a la disposición de sus principales voceros para debilitar y destruir a nuestro Partido; debemos respaldar a la militancia honesta, a la militancia fiel al proyecto revolucionario, a la gente que sigue creyendo en el FMLN, a la juventud combativa que hasta el momento ha mantenido en alto las perspectivas revolucionarias de nuestro partido.

Necesitamos salir en defensa de la militancia que ha defendido la unidad y la integridad moral y el prestigio del partido, a pesar de los actos de traición de los oportunistas que se vendieron al enemigo, que le hacen el juego para debilitarlo y continúan latentes en sus planes desestabilizadores; se necesita fortalecer la motivación de quienes se han fajado con decisión combativa por defender lo justo, la dignidad del Partido; actuar hoy en esta dirección, en corregir cuando todavía estamos a tiempo, es ayudarles a fortalecer su convicción revolucionaria, democrática y socialista.

 

  1. ¿DEBEMOS PARTICIPAR EN LA LUCHA ELECTORAL?

Nuestro planteamiento no está poniendo en duda si debemos o no participar. La lucha electoral es una forma de lucha política muy importante para poner en movimiento a las clases y capas sociales populares y democráticas, a sus organizaciones sociales y políticas, en pro de objetivos políticos relacionados con el Poder. El problema que debemos revisar y erradicar es el fenómeno electorero, la visión electorerista individualista, caudillista, clientelista, de esta importante forma de lucha.

Debemos organizar y movilizar al pueblo, ampliar y desarrollar su base organizada, sectorial y territorialmente; crear un amplio movimiento popular y democrático, que participe y haga suyo el Programa de cambios estructurales; debemos organizar y desarrollar una amplia alianza de fuerzas sociales, democráticas y populares que sean parte del Programa de cambios, desde su formulación y en la lucha por ganarle correlación social; sobre esta base podríamos hablar de pactos políticos con otros sectores políticos confiables con base a las coincidencias;

Debemos mejorar los métodos y procedimientos de selección y elección de los mejores candidatos(as), a los elementos honestos y transparentes para los cargos públicos; debemos trabajar para que estos candidatos y candidatas se ganen el derecho a serlo, en las luchas al lado y al frente del movimiento social y popular.

En esas condiciones tendríamos mejores oportunidades de sentirnos parte desde la base y apoyar a nuestros gobiernos municipales y a nuestra Fracción Legislativa con verdadero respaldo popular.

 

3. DEBEMOS TRANSFORMAR AL FMLN EN UNA FUERZA POLÍTICA REAL.

 

.LA CALIDAD DEL PARTIDO QUE SE NECESITA.

Por último, no quisiéramos desaprovechar la ocasión del 25º Aniversario de nuestro Partido, sin rendir un especial y profundo reconocimiento a los y las militantes de las gloriosas organizaciones hermanas fundadoras de nuestro glorioso FMLN; a las y los militantes revolucionarios de las FPL, de la R N del ERP, del PRTC y del PCS.

Expresamos nuestro profundo Homenaje y respeto a los Héroes y Mártires de todas las organizaciones revolucionarias que ofrendaron sin regateos sus valiosas vidas a favor de la causa popular; quisiéramos expresar nuestro reconocimiento y respeto a las familias de los caídos y caídas en combate, desaparecidos y asesinados políticos, antes, durante y después de la GPR.

30 de julio del 2005